Pasión Blanca: Altibajos

Fuente: Liga Postobon

Unas son de cal y otras de arena para el Once Caldas. Aunque en las últimas fechas, los resultados han sido positivos (2 empates y 2 victorias), el fútbol no termina de convencer a la hinchada manizaleña. 


Y es que el fútbol aún no convence. Desde que Santiago Escobar está al frente del equipo albo, con nóminas muy diferentes en ambos torneos (una experimentada que pudo dar mucho más en el primer semestre y una "en construcción" para el finalización), no ha podido encontrar un funcionamiento técnico y táctico que sea constante, duradero y efectivo.

En este segundo semestre, después de 8 fechas jugadas, el Once Caldas ocupa la séptima posición con 11 puntos, en un torneo irregular por la cantidad de partidos aplazados. Ha ganado 3 encuentros (Tolima, Medellín y Envigado), empatado 2 (Equidad y Alianza) y perdido 3 (Cali, Junior y Millonarios), con un desequilibrio total entre el ataque y la defensa (su gol diferencia es -1).

La dirigencia del equipo tenía claro la importancia de reducir los costos de la nómina, para que su inversión fuera sostenible. Santiago Escobar, actuando más como directivo que como técnico, dejó ir grandes valores del equipo albo (sin dejar de mencionar que el también hace parte de la nómina, pero cuando se le planteó la posibilidad de reducir su sueldo, bastante alto, NO LO PERMITIÓ) y desarmó una nómina con la cual, seguramente, otro técnico pudo haber logrado mejores resultados.

Los refuerzos de este segundo semestre, todos jugadores económicos y desechados por otros equipos, han funcionado a medias. Hanyer Mosquera, traído como zaguero líder, lleva 2 expulsiones infantiles. El peruano Guevara es, tal vez, el peor refuerzo extranjero que ha llegado al Once Caldas en los últimos años. Robles, Cabezas e Izquierdo son jugadores rendidores pero laguneros. Los argentinos son los únicos que han mostrado algo diferente, el Pato Pérez y Minadevino, en distintos partidos, se han "echado el equipo al hombro" y han demostrado cualidades para ser buenos valores del club. ¿Y dónde dejamos a Jorge Daniel Núñez? Con Juan Carlos Osorio, el paraguayo fue, en el 2011, el mejor jugador del segundo torneo, pero con Santiago Escobar es un jugador relegado, al que ni siquiera se le permite entrenar. Entonces no se entiende el técnico antioqueño qué quiere, teniendo jugadores que pueden funcionarle al equipo y que han demostrado, en ocasiones anteriores, todas sus capacidades.

Los últimos resultados del equipo no pueden ocultar la situación verdadera, el ONCE CALDAS no juega a nada. Lo único que nos queda a la hinchada es esperar que la dirigencia sea coherente, los resultados económicos y deportivos van de la mano. Es imposible ignorar la cantidad de ingresos que puede tener un equipo solamente con participar en un torneo internacional. Y con este fútbol, el Once Caldas está cada vez más lejos de estar otra vez en los lugares de honor del fútbol colombiano. 

CODA: Desde esta columna, y estoy seguro que desde todo Manizales, enviamos un saludo de apoyo y fortaleza a Mario González, ex-jugador albo, que se encuentra pasando por un mal momento. Fuerza Mario!!!!!


Por: Daniel Gómez Yepes
Manizales
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