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Por: @EdwardSfe41
Es una gran pregunta, muy difícil de responder en un
equipo tan enigmático, grande y complicado como es el rojo y blanco de Londres,
llevamos varias temporadas intentando descifrar esa pregunta y hemos encontrado
pocas respuestas, entre ellas, unas no muy buenas. Esperemos que ahora sea
diferente.
Pues bien, Arsenal esta temporada está ilusionando y
bastante, tal vez igual que en las anteriores posterior al último título
oficial de nuestras vitrinas, pero esta vez, pensamos muchos que hay un tinte
especial, hay algo que nos da luz, nos da esperanza de volver a gritar
campeones, pero con este Arsenal hay que tener los pies en la tierra e ir
llevando el fútbol y la emoción poco a poco.
Si algo se le ha criticado al Arsenal en esta sequía de
títulos que acarrea es la poca ambición que ha demostrado, claro que tiene un
proceso envidiable por cualquier club del mundo y tiene una manera excitante de
jugar a tal punto de ser llamado ‘La Filarmónica de Londres’, sin embargo,
siempre faltaba algo más para llegar a la cima y ese algo más era jugadores de
primerísimo nivel, tal cual lo exige la liga inglesa.
Arsenal, de la mano de Wenger supo conseguir títulos con
grandísimos jugadores que poco a poco fueron abandonando el club por su edad y
diversas circunstancias, luego, se forjó un proceso con excelentes jugadores de
la cantera y jóvenes que don Arsene fue descubriendo alrededor del mundo, a los
Gunners les hizo falta Highbury y en emiratos tomó las riendas de un equipo
elitista y de performance, una elegancia en todo el sentido de la palabra.
Lastimosamente, Arsenal no ganó títulos a pesar de tener
excelentes jugadores en sus plantillas, lo que a la postre provocó que muchos
de ellos abandonaran el club en busca de gloria, tal cual Fábregas, Van Persie
y otros. Los cañoneros se mostraban como un hueso no tan duro de roer y eso
preocupa y bastante, siguió el fútbol de toque y posesión, los jugadores
canteranos, pero hacía falta algo más.
La temporada anterior tras la salida de Van Persie
Arsenal comenzó a ‘’mosquearse’’ y contrató jugadores de primer nivel como
Cazorla, Podolski y el mismo Giroud, integrándolos a un proceso a los que se
han acoplado con facilidad, hubo ilusiones pero no fue suficiente, finalmente
cayó el equipo y quedamos con las manos vacías de nuevo, todo era desazón en
las toldas Gunners.
Esta temporada Arsenal ilusiona mucho, pinta bien en
Champions, está en el lote de arriba en la liga y a la espera de las copas
locales, ¿por qué?, tal vez sea porque se está despertando ese gigante dormido y
ha dado golpes de autoridad nuevamente con sus incorporaciones que, a priori,
hacen sentir respeto de los rivales. Tal vez sea injusto centrar todo en un
solo jugador pero la llegada de Mesut Özil a Londres renovó la condición de
grandeza del Arsenal, sacudió las dudas y él solo hecho de arrebatárselo al
Real Madrid da ínfulas de jerarquía y eso se ha notado en los partidos.
Este marcado de pases fue muy importante para el Arsenal,
mantuvo sus mejores hombres y ahora están la mayoría en su pico alto de rendimiento,
caso Ramsey, goleador inesperado, así como el buen momento de Walcott y de
Giroud, la defensa y el medio han mejorado en cuanto a la temporada anterior
aunque le falta un poco más y el alemán Özil, en pocos partidos ya ha
demostrado su talento indiscutible y su ponencia en la cancha, definitivamente
tenemos un nuevo Arsenal. Además, los Gunners, se ‘deshicieron’ de muchos jugadores
que tenía a su cargo, caso Arshavin, Gervinho y otros, lo que le dejó un buen
porcentaje de dinero, para tal vez, solo tal vez atacar de nuevo en el mercado
de invierno con una nueva sorpresa….
Nace la ilusión de siempre, pero ahora con motivos de
sobra, hay buen fútbol y muchas cosas por mejorar, pero sobre todo, hay buenos
elementos. Es un arduo camino pero paso a paso de la mano de Wenger y su divino
fútbol podremos volver a gritar ¡campeones!, las cartas están sobre la mesa, ¡vamos
Arsenal, apuesta y juega!
¡Go Gunners!
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