Este año sí fue, ¿o no, hinchas leopardos? Es la frase que repetimos desde el oscuro 2009, cuando nos tocó empezar a jugar en la Primera B. El año inmediatamente anterior, como todos saben, inició la nueva era: nuevos dueños, honorable presidente, proyecto serio, sede deportiva en construcción, divisiones menores en rescate, búsqueda de patrocinios etc. El ascenso no fue posible la temporada pasada, pues al parecer el equipo se quedó corto o se "paró" en los cuadrangulares, pues clasificamos en la agonía ante Cortuluá, y en las finales hicimos el ridículo: todos nos pasaron el trapo por encima.
Igual, todos éramos conscientes de que 2012 se salvó con la salida de José Augusto Cadena, y que 2013 sería el verdadero termómetro de la nueva directiva, y el año en que sí o sí deberíamos buscar el título y el ascenso a nuestra casa: Primera División. Y el equipo se armó, si bien no de una forma fulminante, sí se trajeron jugadores que prometen, además de que debemos tener en cuenta que a hoy no existe patrocinador, y que es difícil armar una "tromba" si no se tiene el dinero.
El figurón será Carlos Daniel Hidalgo. Pastuso goleador que pasó por el fútbol extranjero y por un equipo grande de Colombia como Santa Fe; que fue goleador de un mundial juvenil y que por ello viene a la Ciudad Bonita con el rótulo que lo hace responsable de llevarnos a la A. Otro que llegó fue Aníbal Mosquera, un extremo que varias veces nos pintó la cara cuando vestía la camiseta del Real Santander, y que siempre fue del querer de la afición. Aníbal es rápido y habilidoso, y puede asociarse bien con el uruguayo "Pechu" Yantorno, que permanecerá en la institución usando la 10 de Montanini, de Ramoa y de Marcelo Ibáñez.
Llegó un paraguayo de apellido Mendoza para el ataque, de quien se tienen pocas referencias; igualmente se habla bien de Yeisen Núñez, delantero hermano del popular "Pichú", que viene del Boyacá Chicó. Para la defensa la gran cuota es Yesid Martínez, veterano zaguero que jugó en el Tolima, quien deberá ser el líder de la zaga. Preocupan los laterales, pues Danielito Murillo vive lesionado y por la derecha el recién llegado Rivas no tiene más competencia que el juvenil Sergio Manosalva. Para la recuperación se mantienen los mismos: Correa, Chacón y Barrera; y confiamos en que jugando alguno de ellos con Michi Sarmiento al lado, podamos tener buen manejo de pelota en la mitad.
La B se puso dura con el Cartagena y con la permanencia de Pereira y de América. Pero el Bucaramanga tiene todo para ascender, pues hay un ambiente único, hay un proyecto serio y no tenemos problemas económicos para fortuna de todos. Empezaremos en Santa Marta ante el Unión del "Chino" González Scott, y luego recibiremos al siempre difícil Rionegro. Ahí empezaremos a darnos cuenta de qué estamos hechos.
Por ahora repitamos la frase de siempre: ¡este año sí fue!
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