Millonarios F.C. - Pasión Azul: Frío bogotano, frío Millonarios

Ya con la cabeza puesta en los cuadrangulares, Millonarios comenzaba su camino ante el Deportivo Cali, en el Campín. Para sorpresa de todos, un Millonarios que mostró un fútbol apático, sumado a un Cali que no fue incisivo pero sí preciso, se llevó los 3 puntos de Bogotá y se consolida como líder del grupo B de los cuadrangulares semifinales de la Liga Postobón 2013-II.

Candelo, uno de los jugadores con menor rendimiento. Foto: Juan Diego Buitrago/ETCE


El partido

No fue un juego vistoso, pero Cali, sin mucho esfuerzo, mostró varias falencias en el equipo, al cual se le nota el cansancio; la nómina quedó corta. Candelo entregando mal balones, Ramírez marcando a destiempo, Ochoa muy tímido por los costados, Wason displicente en los balones, en fin. Las anteriores son varias de la situaciones que evidenció el encuentro y que finalmente conjuraron la derrota.

El gol que anotó Lizarazo es la muestra que la defensa se ha vuelto altamente pasiva y que no da garantías como en temporadas anteriores... ¿cansancio?


El funcionamiento

En varios pasajes del encuentro, el equipo quedó 'roto' en la transición de defensa a ataque, puesto que los volantes estaba muy atrás o, estaban muy adelante, dejando así un hueco que Cali aprovechó con los volantes de buen pie que posee. 

Cuando la pelota llegaba a los pies de Candelo, pasa lo de siempre: piensa demasiado el pase, ahí se rearma la defensa; jugadores mal ubicados, que al desmarcarse resultan estar más cubiertos y, finalmente, los pases errados que se están volviendo costumbre en el volante vallecaucano (confeso hincha del Cali). Además, lo más triste es que los balones 'limpios' que pudo colocar llegaron a Wason, que se confabuló con el despilfarro para enviar los tiros afuera o simplemente para mantener un balón que se iba a perder o que lo obligaba a retroceder. En cambio, a Dayro, le tocó pelotazos; apenas tuvo un remate que se estrelló en el palo del arco sur de El Campín... algo pasa.


¿Dayronarios?

Sí, Dayronarios, resulta increíble creer la cantidad de pelotazos (ladrillos) que enviaban desde el medio del campo para que Dayro Moreno se rebuscara una oportunidad para concretarla. En estos últimos partidos se ha visto muy incómodo al artillero de Chicoral y eso lo muestra con sus gestos en la cancha, donde el 'fastidio' por no recibir una pelota clara es evidente. No podemos pensar que Dayro nos debe resolver todos los problemas. Sí, es el jugador del momento en Colombia, pero con la concepción de 'Dayronarios' se deteriora la idea de juego que debería tener Millonarios. Lamentablemente, el apático juego mostrado hoy, hizo que Dayro se contagiara y algunos remates y pases erráticos dan fe de ello. Pero sin duda sigue siendo un grande: es inaudito que en un tiro de esquina, ninguno vaya a cobrar y le toque a él, como delantero, ir a patear esos cobros... fue infame ese momento.


Juego aéreo

Algo que mostró el juego es que carecemos de juego aéreo y eso conlleva que algunos tiros libres que el equipo posea resulten ser más una amenaza, que una oportunidad. Centros a media altura o centros que salen muy duro: ese sigue siendo una asignatura pendiente en el módulo de juego de Hernán Torres.





Próximo rival: Deportivo Pasto

Con la preocupación del juego tan frío que mostró Millonarios, sumado a la victoria que consiguió Pasto ante Caldas, se hace inminente la necesidad de sumar 3 puntos para no perderle pisada al Cali. La fe debe seguir intacta: recuerde, amigo hincha, que el año pasado cuando Millonarios quedó campeón, comenzó perdiendo los dos partidos de los cuadrangulares y después remontó la situación gracias al punto invisible, que para esta oportunidad, también lo tenemos. 

Esa cita será el sábado 23 de noviembre desde las 5:00 p.m. en el Campín. Habrá transmisión por RCN.


Escrito por Mauro Alejandro Gutiérrez Salgado
Bogotá D.C., Colombia
@ErranteSonoro
mauroagutierrezs@gmail.com

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