Copa Confederaciones Brasil 2013: Tahití, no rema con su fútbol, pero sí con su humildad.

Como era de esperarse, era poco y nada lo que podía hacer el campeón oceánico frente al campeón del mundo. Tahití, un equipo que es alegría humana y no futbolística, terminó goleada por un marcador de 10 - 0 por el conjunto del "bigotón" Del Bosque.

Tahití cayó goleado por 10 goles a 0. Fuente: www.tribunadigital.com.ar

Del partido no hay mucho que hablar. Además de los 10 goles, quedará en la retina del mundo el penal que falló Torres, al ser detenido por Roche, en lo que resultó ser la mejor acción del partido por la soberbia celebración ante este hecho.

Tahití le ha mostrado el mundo del fútbol, que pese a la inferioridad, la humildad está por encima de todo. Los gestos en la cancha, la alegría y el gesto de caballerosidad al realizar calle de honor tras el partido, mostró que los valores y el fútbol sí conviven, aunque algunos con sus pasiones distorsionadas no lo vean así. Ese es el ojo pueril del hincha pasional.

Al término de esta Copa Confederaciones, todos recordarán a Tahití con una linda sonrisa. La goleada no es escandalosa, porque ambas partes; España y Tahití, sabían que era un resultado previsible. Así que, los números solo suman a la estadística, pero la humildad de Tahití, suma para la vida y mucho.

Tahití cayó ante la superioridad de España, pero los últimos cayeron ante los gestos de humildad del otro. Situación que desembocó que Tahití sea un campeón en esta Copa Confederaciones. No remaron con su fútbol, pero sí con sus valores. ¡Genios!

Escrito por Mauro Alejandro Gutiérrez Salgado

Bogotá Distrito Capital, Colombia

@MauroGutierrez

mauroagutierrezs@gmail.com