Lunari. Fuente: Millos DC |
Toda la gente mala
leche esperaban con ansias que Millonarios cayera. Después de 3 triunfos
seguidos en liga con contundentes presentaciones se decía que cuando llegara la
hora de jugar de visitante íbamos a caer, que no nos habíamos medido a un rival
de peso etc, etc etc. Millonarios les terminó dando la razón, siempre, claro
está, con sus matices.
Un equipo de fútbol puede perder,
claro está. El Real Madrid de la era de Mourinho primero se tuvo que comer 5
del Barcelona para después quitarle la hegemonía en liga y salir campeón,
llegar a varias semifinales de Champions, ganar una Copa del Rey. El Atlético
de Madrid tuvo que pasar 16 años de no poder ver una victoria ante su clásico
rival, el equipo merengue, de ser humillado, para hoy poder decir con orgullo
que tienen de hijos a la casa blanca. Un
equipo de fútbol puede perder, un equipo grande puede perder, pero no de la
forma en que se perdió el domingo contra el Deportivo Cali. Eso roza con lo
absurdo, lo indeterminable, lo reprochable y lo injustificable.
Habíamos dicho veces pasadas que el
equipo iba bien encaminado pero que le hacía falta una prueba de fuego, y
primero llegó el partido contra el Deportes Tolima. Hay que ser claros con ese
juego que se disputó en Ibagué muy a las 8 de la noche: No se jugó bien, hubo
destellos de buen fútbol, pero ninguno de los dos equipos jugó bien, el
resultado de la derrota fue decidido por el PESIMO arbitraje del señor Juan
Pontón y compañía, quienes el segundo tiempo se dedicaron a darle manejo al
partido con el pito en la boca y a causar la derrota de Millonarios por un
penal inexistente, por una falta cometida en el área del Tolima que el “juez”
no sancionó entre otras fallas arbitrales. De ahí la derrota por 1 a 0 pero no
había porqué alarmarnos. Un partido se puede perder.
El problema vino el domingo, cuando
enfrentábamos a un Deportivo Cali que venía mal, sin ganar, en crisis de
resultados. ¿Cómo es que un equipo que ocho días antes era el equipo que mejor
jugaba en la liga y hoy es el peor del mundo? Eso se lo dejo a los hinchas
encarnizados y que están pidiendo la cabeza de Raimundo y todo el mundo ya. Mi
pregunta para el análisis es ¿Cómo es que un equipo que empieza ganando un
partido desde el minuto 2 termina perdiendo 5 a 1? La respuesta parece sencilla
pero a la vez no: Todo salió mal, desde el planteamiento hasta el juego de los
jugadores. Todo fue un desastre. En pocas palabras, para los que vivimos
pendientes de Millonarios hasta en el Pony Fútbol, el partido contra el
Deportivo Cali fue la fecha 19 del segundo semestre de 2014.
Fue recordar esos fantasmas que nos
persiguieron el semestre pasado minuto tras minuto. De los 5 goles, 4 fueron
balones largos a la espalda de la defensa de Millonarios. Santos Borré, muy
criticado en el suramericano sub 20 en Uruguay, hizo la fiesta ante
Millonarios. Claro, jugar con la selección Colombia sub 20 un suramericano en
Uruguay no es NADA comparado con enfrentar a Millonarios. Cuando se enfrenta a
Millonarios, se juega a muerte, y eso es algo que algunos jugadores de
Millonarios no han entendido: TODOS los rivales que enfrenten van a salir a
jugarse el partido de sus vidas, como si fuera el último; eso no sucede con
NINGÚN otro equipo del país.
De ahí que viniera el desastre de
partido que vimos en Palmaseca. A Lunari le critico el planteamiento, pero no
se puede excusar diciendo que la lesión de Oswaldo Henríquez cambió todo el
partido: hay que recordarle al “Mono” que en Ibagué se jugó más de media hora
con un hombre de más y que no supimos hacer la diferencia, además de eso,
Henríquez no es Beckenbauer ni mucho menos como para aludir la goleada a ese
hecho. El equipo jugó mal todo el tiempo, nunca supo que hacer, nunca se supo
acomodar en la cancha.
Además de lo anterior, Luis Mosquera
y Kevin Rendón llevan ya 2 partidos con este (contra Equidad por Copa Águila)
en que es mala su actuación. Lo más triste de todo es que tenemos que ser
claros en que a pesar de los 5 goles, la sacamos barata. Pudieron haber sido
más. Fue tan desastrosa la presentación, que la que era la vaya menos vencida
del torneo y figura del equipo, hoy tiene en su haber algunos errores que por
precipitación costaron esa dolorosa derrota.
Cuando se pensó que Lunari iba a
recomponer el equipo para la segunda etapa y que Millonarios iba a salir con
otra actitud, ni bien pitaba el árbitro cuando caía el cuarto gol del Cali.
Después de eso, no hay excusa, no hay disculpa, no hay nada. Ni la entrada de
Mayer Candelo y de Maximiliano Núñez ayudó para amenizar la derrota, por el
contrario, falta en el área de Millonarios y pena máxima para el Deportivo Cali.
5 a 1 y a las duchas.
Pronóstico que Millonarios le gana a Expreso Rojo
el miércoles por Copa Águila, el fin de semana golea a Equidad por liga, y
luego saca un “valioso empate” de visitante contra Águilas. Después de eso enfrentamos a Santa Fe. ¿Se
volverá a repetir la historia del semestre pasado cuando, estrenándose como DT
de Millonarios, Santa Fe goleó a Millonarios por 4 a 1? Si hay que corregir,
hay que hacerlo YA. Olvidémonos que tenemos 2 partidos pendientes. Un equipo
grande puede perder, pero no puede volverse a repetir lo del domingo. Por
ahora, esperemos una buena victoria el miércoles contra Expreso Rojo para
recomponer el camino en Copa y luego volver al andar de la victoria por Liga
ante la Equidad.
Por lo pronto,
nunca estarás solo. FUERZA MILLONARIOS!
Michael Andrés
Méndez Torres
@maicol841 en
twitter.
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