Foto:Pedraza Producciones |
No había mejor oportunidad de ascender rápidamente que estos
cuadrangulares entre equipos históricos de la primera división. Real Cartagena
fracasó rotundamente en conseguir el objetivo de llegar a la A al caer
derrotado 3-0 ante Cúcuta en la primera fecha y luego 2-1 ante Quindío en la
segunda. El partido contra Atlético Bucaramanga ni siquiera se llegó a
disputar. ¿Qué le pasó al cuadro heroico en Bogotá? Eso se han preguntado los
hinchas auriverdes en estos días.
A diferencia de muchos hinchas auriverdes que piensan que la dirigencia es la principal
responsable de este fracaso yo opino diferente, la responsabilidad más grande
la tiene el cuerpo técnico. Real Cartagena estuvo entrenando casi 40 días en
Bogotá y el entrenamiento casi ni se notó, los dirigidos por el profesor
Jiménez evidenciaron las mismas
carencias del Torneo Postobón II: Alta tenencia del balón pero poca
profundidad, dependencia de los tiros libres de Salinas, exceso de pelotazos y
poca salida del lateral izquierdo. Además de estas carencias el equipo mantuvo
la tendencia de ser derrotado fuera del Jaime Morón.
Es muy triste que en tanto tiempo de entrenamiento se haya mejorado muy
poco. Sinceramente esperaba más de los refuerzos, en especial de Wilmer Parra
Cadena y de Juan Galicia, el delantero estuvo muy estático en ambos partidos,
mientras que el experimentado defensa estuvo pasivo en marca y al parecer
estaba muy mal de forma. Por otro lado Murillo y “el quemao” Sánchez mostraron
cosas interesantes y se espera que le aporten al equipo si permanecen en él. Me
sigue preocupando el nivel futbolístico de Yesus Cabrera, el volante creativo
está lejos del nivel que le conocimos en 2013, y si él es el de las ideas y no
aparece a este Real Cartagena le cuesta generar opciones. Bayron García fue
otro de los que se esperaba más, el portero de destacadas actuaciones en 2014
no estuvo en sus mejores días y esto también contribuyó a las derrotas.
Sobre este caso puntual no tengo nada que decir de la directiva. Muchos
culpan a los máximos accionistas del equipo por este fracaso, pienso que se
equivocan. La directiva brindó todas las condiciones para que el equipo consiguiera
el tan anhelado ascenso. Fue el primer equipo en llegar a Bogotá, les brindaron
las condiciones ideales a los jugadores para su preparación y reforzaron al
plantel con jugadores de experiencia. Sobre el tema de refuerzos, habría que
revisar si fueron pedidos por el profesor Jiménez, de resto no hay nada que
reprocharles en este caso.
Por último no entiendo por qué no se jugó el partido Real Cartagena vs
Bucaramanga, esto en un torneo serio no pasa. A pesar de que el partido no
sumaba ni restaba se debía haber jugado, cancelar el partido hace ver que el
FPC es manejado como un torneo interbarrios, una total vergüenza. Y no solo
eso, modificar la fecha del partido Cúcuta vs Quindío también es vergonzoso.
Estas decisiones no se deberían tomar a la ligera, sin embargo pasan estas
cosas inadmisibles que empañan al fútbol colombiano.
Consumado el fracaso no queda más que levantar cabeza. En febrero
empieza el Torneo Águila con un nuevo formato y Real tendrá una nueva
oportunidad de ascender, esta vez a lo legal (como debería ser), lo mejor es
que es un torneo largo, y en juego largo hay desquite. ¡Vamos Real!
Escrito por: Uriel Pájaro López
@ElPropioBane
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